martes, 27 de mayo de 2008

AL RESCATE DE LA LITERATURA ESCRITA POR MUJERES

Por Ivet Rodríguez

La literatura escrita por mujeres no es un fenómeno reciente. Históricamente el escribir ha sido visto como una práctica inútil e, incluso, deshonrosa para las mujeres. Al proliferar las obras escritas por varones, la literatura escrita por mujeres ha sido poco valorada, salvo contadas excepciones.

El auge del que actualmente goza la literatura escrita por mujeres a nivel mundial es producto de una evolución tanto histórica como cultural; por lo que se hace necesario estudiar o, por lo menos, conocer la labor desarrollada por las mujeres escritoras que hicieron posible que su trabajo viera la luz.

En el ensayo titulado “El oficio de escribir, la profesionalización de las mujeres mexicanas (1850-1940)”, Elizabeth Vivero Marín explica que pese a la profesionalización de la escritura de mujeres y el apoyo otorgado por las instituciones de los estados y de la federación, aún hoy las escritoras sólo representan el 25 por ciento del universo de autores mexicanos.

Vivero Marín cuanta que, a excepción de Sor Juana Inés de la Cruz, los nombres de escritoras mexicanas escasearon hasta la primera mitad del siglo XX, evidenciando el olvido de que ha sido objeto, por ejemplo, la jalisciense doña Refugio Barragán de Toscano, primera novelista mexicana.

Ese mismo destino ha sido compartido por la veracruzana María Enriqueta Camarillo y Roa, nacida en 1872 y considerada la primera escritora profesional mexicana que publica en 1907 su primer volumen de poesía Rumores de mi huerto.

Con el objetivo de rescatar y difundir las obras literarias de escritoras tanto de lenguas extranjeras como de habla hispana, profesoras del Colegio de Letras Modernas y del Colegio de Letras Hispánicas de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM crearon el Seminario Interdisciplinario de Escritura Femenina (SIEF).

En entrevista, Claudia Lucotti Alexander, licenciada y maestra en Letras Inglesas por la UNAM, explicó que si bien es cierto que la escasa presencia de autoras en la literatura es una realidad, también lo es que en América Latina, la profesionalización de la escritura ha sido más lenta en el caso femenino.


Para Claudia Lucotti, la situación de las mujeres escritoras ha cambiado según la época y el contexto. Así, mientras en los países de América Latina el oficio de escribir se convierte en una profesión a la cual se dedican un gran número de mujeres a partir de la segunda mitad del siglo XX; en las ex colonias de habla inglesa –como es el caso de Canadá-, la mujer tuvo, desde el siglo XIX, una participación importante en la producción de cuento y poesía.

En países como Gran Bretaña, Francia, Estados Unidos y Canadá, la mujer tuvo una vida ligeramente más libre, más autónoma, con menos tabúes. En estas regiones, las mujeres se vieron en la necesidad imperiosa de trabajar; mientras que en México, por ejemplo, una mujer que viviera del fruto de su trabajo ponía en entredicho su calidad moral.

Según Lucotti, quien también es miembro del SIEF, un factor determinante para que las mujeres fueran publicadas y tuvieran un reconocimiento social –como ocurrió en Canadá– fue la red de solidaridad tejida entre las mismas autoras: “se leen, se apoyan, se publican, se difunden unas a otras”, señaló.

Sin duda alguna las realidades sociales de América Latina y de Europa son muy diferentes. Por lo que cada país tendrá que encontrar el camino, según sus propias necesidades, características y valores, para impulsar la literatura escrita por mujeres.

“No estoy planteando que la solución es que las nuevas generaciones de escritoras imiten lo que han hecho las mujeres en Gran Bretaña, por ejemplo; pero nunca está de más saber lo que pasa en otras partes”.

Uno de los principales logros del SIEF ha sido concientizar a la comunidad de profesores y alumnos de la Facultad de Filosofía y Letras sobre el tema del género ligado a las humanidades, y en específico, a la literatura. No obstante, “debemos seguir trabajando, invitar a las nuevas generaciones a que se interesen e investiguen sobre el tema y, desde luego, publicar más al respecto”, concluyó Lucotti Alexander.

MARX EN LA UNAM

Por Ivet Rodríguez Rodríguez

México (Aunam). Actualmente el capitalismo está dando muestra de sus efectos más devastadores: pobreza, desigualdad y discriminación son síntomas de un sistema económico que favorece a unos pocos y desampara a la mayoría; por eso, “hoy Marx se hace más necesario que nunca”, aseguró Enrique Dussel.

El doctor en Filosofía por la Universidad Complutense de Madrid afirmó, en el marco del seminario 190 aniversario del nacimiento de un clásico: Karl Marx, celebrado en la UNAM, que Marx definió a la historia de la humanidad como la historia de las luchas entre los explotadores y los explotados.

Para el clásico, los primeros son los dueños de los medios de producción, mientras que los segundos se ven obligados a vender lo único que poseen: su fuerza de trabajo. “El pobre no tiene otra cosa que vender más que su cuerpo, su fuerza de trabajo. Se vende casi como una prostituta. Si no lo hace se muere de hambre”, manifestó Dussel.

“Marx era un crítico del capitalismo, por lo que fue peligroso en su tiempo y lo es aún”; el también catedrático de la UAM Izatapalapa reveló que la mitad de la obra de Marx no ha sido traducida al castellano todavía porque “se volvería peligrosa si se publica entera”.

“El 50 por ciento de Marx está inédito. Sus últimas publicaciones no han sido traducidas al castellano, lo que no ha permitido entender la totalidad de su obra”, aseguró.

El también doctor en Historia por la Sorbona de París exhortó al público, y en especial a los jóvenes, a leer a Marx con otros ojos: “Necesitamos gente que se ponga a estudiar a Marx seriamente y que entonces pueda entender lo que fue este genio”.

Finalmente, Héctor Díaz-Polanco, investigador en el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), explicó que la importancia de Marx en el debate latinoamericano y mundial radica en que estableció las armas para la lucha política en la medida en que clarificó las relaciones económicas y sociales en el capitalismo.

lunes, 26 de mayo de 2008

FIESTA MUSICAL EN LA UNAM

Por Ivet Rodriguez

Es casi medio día. Las tonadas de un saxofón se mezclan con el viento cálido que transita por las islas de Ciudad Universitaria. Una voz femenina hechiza a quienes caminan por la inmensa alfombra de pasto color verde esmeralda.

Algunos curiosos se acercan. “Ollin Kan en la UNAM” dice un letrero que cuelga en lo alto de una gran carpa blanca. Después de echar un vistazo, algunos deciden quedarse mientras que otros sencillamente siguen su camino.

Ana, una joven de larga cabellera negra, camina presurosa por los alrededores, mueve la cabeza de un lado a otro como si buscara algo. Una mano levantada llama su atención. Ella sonríe y con paso firme se dirige al encuentro de sus dos amigos: Lola y Chuco.

Con un beso en la mejilla Ana saluda a Lola y con un estrechón de manos a Chuco. Luego de caminar por algunos minutos, el trío decide sentarse y esperar a que inicie el evento.

Costo Rico hace algunas pruebas de sonido. Las canciones inconclusas interpretadas por la agrupación catalana son tan sólo una probadita de la fiesta musical que está por comenzar. “¡Se ve que va a estar bueno!”, dice Ana a sus dos amigos.

En grupos, en parejas o de a solapa, poco a poco la gente comienza a llegar. Unos se sientan en el pasto y otros más buscan la sombra de un árbol para protegerse de los rayos inclementes del astro rey.

Para amenizar la espera, un grupo de universitarios no pierde la oportunidad de improvisar un día de campo con sopas Maruchan, palomitas al microondas y Coca-Cola. A falta de comida, algunas parejas sacian su hambre con un beso y alguna caricia.

Un hombre se pasea entre la gente con su carrito de congeladas marca “pingüino”, mientras una vendedora de papas fritas se coloca junto a una bicicleta que lleva a cuestas una canasta de tacos sudados y un bote de salsa verde.

Suéteres, mascadas, paraguas y hojas de papel son buenos para cubrirse del Sol. Cuarenta minutos de retraso dan paso a chiflidos y a algunos recordatorios de madre.

“¡Con ustedes Las Furias!”. Un hombre corpulento y tres féminas ataviadas con vestidos llamativos, medias y tacones altos aparecen en el escenario. Una canción bastó para prender los ánimos de los universitarios que se olvidaron del calor infernal y bailaron por una hora al ritmo de rock.



El reloj de Ana marca las 2:15 cuando la agrupación catalana toca su última rola. Con cámaras fotográficas y de video algunos buscan inmortalizar el momento. “¡Otra, otra, otra!”, corea el público... La canción nunca llegó.

Minutos más tarde, Virus hizo su aparición. Ante la sorpresa de muchos, dos de Las Furias subieron de nuevo al escenario. “¡Son las mismas, a mi no me engañan!”, grita Chuco mientras Lola y Ana ríen.

Algunos zapatos, calcetines y guaraches yacen sobre el pasto mientras sus dueños bailan El baile de los huesos, la última canción interpretada por Virus. Montones de mochilas de todos colores, tamaños y formas atrincheran botellas color ámbar y bolsas de papas.

Es el turno de Village Kollektiv. Cuatro hombres y tres mujeres de tez nevada, cabellos de oro y ojos turquesa hacen su aparición en el escenario. Con paso presuroso suben sus instrumentos, los despojan de sus fundas negras y los afinan cuidadosamente.



Tonatiu, el rey Sol, juega a esconderse entre las nubes. El cielo se nubla por unos instantes. Problemas con el sonido retrasan la participación de la agrupación polaca.

Los ánimos se relajan, un viento juguetón mueve los negros cabellos de Ana, quien golpea una y otra vez el pasto con su pie derecho mientras observa que las manecillas de su reloj marcan las 3:50.

Algunos sonidos guturales llaman nuevamente la atención del público. “¡Con ustedes Village Kollektiv!”. Los aplausos no se hacen esperar. Una fusión de sonidos tradicionales con ritmos electrónicos inunda la atmósfera del Campus Universitario.

Una hora más tarde, Tonatiu sale de su escondite para recibir a Costo Rico. A ritmo de reggae y rumba, la agrupación catalana hizo que brazos, caderas y pies se movieran de un lado a otro y de arriba abajo. Unos y otros se toman de los hombros y forman una serpiente humana que se pasea traviesa entre la gente.


Quienes tienen alma de cirqueros no pierden la oportunidad de demostrar su destreza con pelotas, aros y pinos. Los lanzan una y otra vez, logran mantenerlos en el aire por algunos instantes hasta que algún movimiento erróneo los hace caer al suelo.

Playeras, pulseras y tasas con el logo de Ollin Kan reposan en el suelo esperando ser compradas por quienes desean materializar el momento con algún recuerdito. Chuco compra una pulsera color negro, mientras que Lola se conforma con las fotos que ha tomado con su celular.

El anuncio de una última canción vaticina el final del concierto. La tarde comienza a caer, las manecillas del reloj de Ana forman una línea vertical perfecta. “Ya vámonos, ¿no?”, dice Chuco a sus dos amigas.

Las tres siluetas caminan por las islas universitarias hasta perderse en la inmensidad del campo verde esmeralda.

REVISTA DE LITERATURAS POPULARES

Por Ivet Rodríguez


La Revista de Literaturas Populares es un espacio de encuentro para quienes se interesan por los variados aspectos de la literatura popular mexicana e hispánica.

En esta publicación el lector encontrará manifestaciones literarias folclóricas, poesía, narrativa, teatro y refranero, entre otras; así como la llamada literatura de masas, literatura de cordel, folletín, novela rosa, fotonovela y cómic; o sea, textos impresos, frecuentemente urbanos y de amplia difusión.

La Revista de Literaturas Populares es una publicación semestral cuyos contenidos están organizados en tres secciones: “textos y documentos, estudios y reseñas de libros”, explicó Margit Frenk, directora de la publicación.

Los trece ejemplares de la Revista de Literaturas Populares están disponibles en la dirección electrónica www.rlp.culturaspopulares.org, todos en formato PDF.

EL FUTURO ERA NUESTRO

Por Ivet Rodríguez Rodríguez

Eugenia Meyer, doctora en Historia por la UNAM, es pionera en el campo de la historia oral, ámbito que le ha permitido recuperar las historias de vida de los exiliados españoles y latinoamericanos en nuestro país.

El futuro era nuestro narra las historias de ocho cubanas nacidas entre 1900 y 1950. Los testimonios de las protagonistas son la referencias con la que Eugenia Meyer hace un contraste entre las expectativas que se vislumbraron a veinte años de la Revolución y el curso que tomó la historia cubana en las décadas siguientes.

Las entrevistas se llevaron a cabo en 1979 y en su mayoría expresan el optimismo respecto a los logros de la revolución cubana que en ese entonces era extendido dentro y fuera de la isla. Ese optimismo se matiza con epílogos que actualizan las historias de sus protagonistas. En algunos casos, los acontecimientos se desenvolvieron por caminos muy distintos a los esperados por ellas y en otros siguieron el rumbo previsto.

En entrevista, la autora explicó la importancia de retomar el testimonio de las mujeres cubanas ante la falta de estudios sobre el tema: “Siento que existe mucho mayor documentación sobre la vida de los hombres… y más en ese momento en dónde todos eran héroes”, expresó.

Aún cuando difieran los orígenes sociales, la raza, el lugar de nacimiento y de residencia, los intereses y las ocupaciones de las ocho voces femeninas, el texto se unifica en una narración cuyo hilo conductor es la vida cubana del siglo XX y, en particular, la efervescencia producida por el triunfo revolucionario en 1959.

Además de El futuro era nuestro. Ocho cubanas narran sus historias de vida, Eugenia Meyer ha publicado México en la conciencia anglosajona; Revolución e historia en la obra de Luis Cabrera; Jesús Reyes Heroles, los caminos de la historia, y Los tiempos mexicanos de Max Aub.

GUÍA PARA LA PUBLICACIÓN DE LIBROS (9)

Promoción: hacer que la gente desee comprar el libro

El término promoción incluye todos los métodos empleados por una editorial para dar a conocer un libro y hacer que la gente desee comprarlo.

Generalmente se establece un fondo para promoción inicial equivalente al 10% de las ventas esperadas en la primera edición, y no gastar más en promoción en tanto el libro no muestre evidencias de haber pegado, y que las ventas rebasarán la primera edición.

Cada libro tiene necesidades promocionales específicas. No hay una fórmula precisa que pueda ser usada para todos los libros. Sin embargo, existen seis elementos promocionales empleados generalmente: 1) el forro del libro, 2) ejemplares de obsequio para reseñas en periódicos y revistas, 3) presentaciones, 4) anuncios entre libreros, 5) visitas de vendedores a librerías, escuelas y demás, y 6) algún tipo de publicidad impresa.

Forro o camisa. Es un gancho visual. En él se pueden incluir datos tales como quién es el autor del libro, las opiniones de los críticos calificados y otros de talles.

Ejemplares para reseña.
Los libros destinados a este fin deben ser enviados a periódicos, revistas y columnistas y a comentaristas de radio y televisión. El envío de ejemplares puede hacerse con base en una lista cuidadosamente elaborada. Esta relación se conserva y tiempo después se hace una revisión de publicaciones para determinar quienes reseñaron el libro recibido. No hay que esperar que un comentarista reseñe todos los libros que se le han enviado, sin embargo, si nunca lo ha hecho será mejor quitarlo de la lista.

Copias para presentación. Es una forma de publicidad gratuita que consiste en el envío de ejemplares, acompañados de una breve nota del editor o autor solicitando su punto de vista acerca del libro, a personas cuyas opiniones pesan entre el público, por ejemplo: 1) líderes de opinión en la vida cívica o intelectual, 2) especialistas en la materia tratada por un libro, 3) conferenciantes cuyo comentario acerca de un libro pueda influir en la opinión de otras personas, 4) figuras importantes en la educación, 5) distribuidores de libros que pueden ser buenos compradores si les gusta el libro, y 6) directores de periódicos que tal vez publiquen editoriales sobre los temas tratados.

Anuncios del editor. Son avisos acerca de la próxima aparición de un libro, especificando la fecha, su precio y el descuento correspondiente. Para libreros atentos, esta información elemental sirve como promoción y los inducirá a hacer sus pedidos.

Visitas del representante de ventas. Se refiere a las visitas que los agentes de ventas hacen a librerías, escuelas y bibliotecas.

Anuncios por correo. Normalmente los anuncios por correo se utilizan para promover libros destinados a un público selecto.

Cupones. Los volantes enviados por correo generalmente incluyen un cupón que el cliente puede enviar a la editorial solicitando un ejemplar del libro.

Radio y televisión. Ponentes, comentaristas y críticos de libros en los medios de difusión electrónicos contribuyen a que radioescucha y televidentes deseen comprarlo y además general promoción “oral”.

Carteles. Éstos generalmente reproducen la portada del libro no del folleto promocional, y son enviados a las librerías y fijados en otros sitios.

Exposiciones. Generalmente son organizadas por las eidtoriales cuando se presentan muchos libros. La selección de libros para una exposición, dependerá del tipo de gente que se espera acuda a la misma. En México, La Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería y la Feria Internacional del Libro de Guadalajara son ejemplos de exposiciones.

Premios. Algunos libros se benefician con la promoción gratuita que proporciona la obtención de premios que otorgan algunas organizaciones como el Premio Novel.

Publicación en revistas. Algunos fragmentos de libros pueden ser publicados como artículos en revistas o como crónicas periodísticas antes de su aparición. Esto resulta de mucha utilidad, sobre todo si el autor exige que vaya acompañado de una nota que aclare que el texto forma parte de un libro de próxima aparición y proporcione el título y el nombre de la editorial.

Presentaciones del autor. Si el autor cuenta con reconocimiento a nivel nacional, son útiles las entrevistas por radio y su aparición como conferencista o su asistencia como invitado de honor a banquetes y recepciones. Estas presentaciones sirven para promocionar básicamente al autor.

Un gerente de promoción debe tener imaginación creativa, para saber cómo y dónde promocionar los libros, y sentido de oportunidad, para saber cuándo es el momento más idóneo para hacerlo. En este sentido, el gerente de promoción debe estar siempre atento a los sucesos que ocurren en el mundo y a los eventos que despierten el interés del público.

FUENTE: Smith, Datus, Guía para la publicación de libros, Universidad de Guadalajara, México, 1991.